Con el ensayo de abocardado, se expande la extremidad de un tubo, según el diámetro interior, por medio de un mandril cónico. El ensayo finaliza al alcanzar el valor de abocardado predefinido en las especificaciones. El ensayo se considera superado si, después del mismo, no se detectan grietas en el cordón de soldadura o en la tubería.
El ensayo de abocardado se lleva a cabo, generalmente, en tubos de diámetro exterior hasta 150 mm y espesor de pared hasta 10 mm. En aquellos tubos o tuberías donde no se puede detectar el cordón de soldadura se lleva a cabo el ensayo de abocardado.